La aparición de los comparadores de seguros cambió la dinámica de venta de los productos de seguros creándose un espacio en un mercado altamente competitivo. Sin embargo, las InsurTechs tienen el potencial de desafiar a los comparadores, ofreciendo beneficios similares pero mejorando la experiencia del cliente.
Con el tiempo, los comparadores se han consolidado como un canal importante para la distribución de ciertos productos de seguros generales, como por ejemplo el seguro de automóviles. El consumidor puede comparar en un único sitio el precio de múltiples ofertas de seguros lo que le ahorra tiempo y potencialmente dinero en productos aparentemente homogéneos. Esta comodidad ha convertido al seguro de autos en el producto más vendido a través de estas plataformas (según una encuesta al consumidor de seguros del Reino Unido de 2020 de GlobalData, el 31% de las personas compraron su póliza de automóviles a través de un comparador).
La plataforma Caura se lanza a los seguros
Este aparente éxito de los comparadores no ha pasado desapercibido por las Insurtech que ven en este canal una oportunidad para ofrecer nuevas propuestas disruptivas. Uno de los ejemplos más recientes es la plataforma Caura lanzada a principios de este año por Sai Lakshmi diseñada para administrar todos los trámites administrativos (matriculación, ITV, …) y los pagos relacionados con su uso (peajes, parkings, …) que recientemente ha empezado a vender también seguros.
Según la compañía, los clientes pueden consultar y contratar un seguro en tan solo 60 segundos, menos tiempo que el que normalmente se emplean en un comparador. La tecnología utilizada por Caura permite agilizar el proceso de registro y verificación para los clientes, y una vez contratado el seguro los clientes pueden administrar su póliza a través de la aplicación (cosa que no permiten los comparadores). De esta forma, la aplicación se convierte en una especie de ventanilla única para los propietarios de automóviles, permitiéndoles administrar todo aquello relacionado con su vehículo.
Honcho, una aplicación de “subasta inversa”
Otro ejemplo es la plataforma Honcho, lanzada a mediados de 2019 y comercializada como una aplicación de “subasta inversa”. A diferencia de los comparadores convencionales, donde los clientes introducen sus datos para recibir cotizaciones de seguros de automóviles, en Honcho el propietario escoge las coberturas y características que quiere para su seguro para luego recibir ofertas de las compañías. Cada oferta viene con una puntuación de Honcho, que indica qué tan cerca está de los términos deseados por el usuario.
Estos dos ejemplo, son una muestra más de cómo las InsurTechs fundamentan gran parte de su apuesta por mejorar la experiencia del cliente, los productos y pólizas ofertadas, reducir la brecha entre las necesidades y deseos de los clientes y eliminar los puntos débiles en el proceso de compra. Ante esta competencia, es evidente que los comparadores se verán obligados a vigilar los movimientos del mundo InsurTech y a invertir recursos en innovar y probablemente rediseñar su propuesta de valor si no quieren desaparecer tan rápidamente como aparecieron.
¿Me pregunto cómo puede ser que el canal mediador tenga la obligación de cumplir la Obligación de información y Recomendación Personalizada, mientras potenciales clientes «compren» un seguro mientras se distraen con un videojuego o marquen un precio para obtener una propuesta…. me pregunto qué criterio se utiliza para realizar la oferta más adecuada a cada cliente?